Ayer por la tarde, en la sede de la Asociación Bancaria de Chivilcoy, se llevó a cabo un homenaje a quien fuera Secretario General de la organización sindical, fallecido hace un año.
El actual secretario General José María Giorgetti dirigió unas emotivas palabras en presencia de la viuda de Fernando Roche, otros familiares, y una gran concurrencia de compañeros de tarea.
Además, se leyeron la adhesiones de todo el personal de la sucursal Chivilcoy del Banco Credicoop y del Secretario General de UATRE, Fabio Britos.
Giorgetti, visiblemente emocionando, dijo: “Hoy es un día muy especial para quienes integramos la familia de la bancaria porque se cumple un año de la desaparición física de quien fuera nuestro Secretario General, nuestro amigo Fernando"
"Este es un día muy difícil y pensé que tenia que escribir unas palabras, pero después meditándolo, me di cuenta que todo lo que escribiera seria protocolar y lo mejor que puede pasar en estos casos, es decir las cosas que salen del corazón".
"Entonces pensé que había que hablar de la ausencia, de que no está Fernando y del tiempo anterior que en que estuvo con nosotros pero no encuentro palabras para decir lo que significa su ausencia".
"Me resulta mas fácil hablar de lo que es la presencia, y la presencia de Fernando sigue estando acá, en cada cosa, en sus hijos, sus nietos, en Marta. Todos los compañeros están presentes en esta policlínica, donde él hizo un esfuerzo terrible para construirla, que es merito de él, entonces me reconforta, seguir teniéndolo presente a través del recuerdo".
"Creo que si tuviéramos que buscar una forma de definirlo diríamos que se trataba de una buena persona, un amante de su familia, una persona preocupada constantemente con cada cosa que ocurría con sus hijos, a pesar de que eran hombres y que tenían su propia familia".
"Era un tipo que ayudaba a todo el mundo, al que conocía de toda la vida y al que recién conocía, a todos estaba dispuesto a darle una mano. Ese era Fernando y lo describo con una sola frase 'Fernando era un buen tipo”
Luego, familiares (sus nietos, esposa e hijos) descubrieron una placa recordatoria en el hall de la institución.
De esta manera la familia bancaria recordó a quien fuera un referente del gremialismo local y un hombre apreciado, que a temprana edad dejó de existir.
